En la actualidad, los consumidores están cada vez más interesados en llevar una alimentación saludable. Sin embargo, las etiquetas de los alimentos pueden resultar confusas o incluso engañosas, dificultando la elección de productos verdaderamente beneficiosos para la salud. Es esencial comprender el significado real de estas etiquetas para tomar decisiones informadas y evitar ser víctimas de estrategias de marketing que pueden inducir a error.
Etiquetas engañosas: una trampa común en los supermercados
Muchas veces, los productos exhiben términos como «natural», «light» o «sin azúcar añadido» que, a primera vista, parecen indicar una opción más saludable. No obstante, estos términos no siempre reflejan la realidad nutricional del producto. Por ejemplo, un producto «light» puede tener menos calorías que su versión original, pero aún contener altos niveles de azúcares o grasas saturadas. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), algunas etiquetas trampa intentan hacernos creer algo que no es cierto, induciendo al consumidor a pensar que está eligiendo una opción más saludable cuando no es así.
Comprendiendo el significado real de las etiquetas
Para evitar ser engañados por el etiquetado, es fundamental entender qué significan realmente estos términos:
- Natural: No existe una regulación estricta sobre el uso de esta palabra. Un producto puede contener ingredientes naturales y, al mismo tiempo, aditivos o conservantes.
- Light: Indica una reducción en algún componente, como grasas o azúcares, pero no necesariamente significa que el producto sea bajo en calorías o saludable.
- Sin azúcar añadido: Significa que no se han añadido azúcares durante el proceso de fabricación, pero el producto puede contener azúcares naturales en cantidades significativas.
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) proporciona información detallada sobre las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables permitidas en los alimentos, ayudando a los consumidores a interpretar correctamente el etiquetado.
Consejos para una elección informada
Para tomar decisiones más saludables al comprar alimentos, considera los siguientes consejos:
1. Lee la lista de ingredientes: Los ingredientes se enumeran en orden descendente según su peso. Si el azúcar o las grasas saturadas aparecen al principio, es señal de que el producto contiene altas cantidades de estos componentes.
2. Revisa la información nutricional: Presta atención a las porciones y al contenido de nutrientes clave como azúcares, grasas saturadas y sodio.
3. Desconfía de las afirmaciones generales: Términos como «natural» o «artesano» pueden ser utilizados con fines de marketing y no siempre reflejan la calidad nutricional del producto.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha denunciado en varias ocasiones el uso de etiquetas trampa en alimentos, instando a los consumidores a ser críticos y a informarse adecuadamente.
En conclusión, aunque las etiquetas de los alimentos pueden parecer una guía útil para elegir productos saludables, es esencial analizarlas con detenimiento y comprender su verdadero significado. Al hacerlo, podrás tomar decisiones más informadas y evitar caer en las trampas del marketing alimentario. Recuerda que una alimentación saludable se basa en una dieta equilibrada y variada, más allá de las promesas que puedan aparecer en el envase de un producto.